"La justicia es gratuita; lo que cuesta son los medios de llegar a ella." Eugenio Brieux
En alguna oportunidad de nuestra vida hemos presenciado algun acto o hecho que consideramos injusto y que de una u otra forma nos sentimos obligados a corregirlo. Llamese conciencia, etica, culpa o cargo de conciencia, lo cierto es que esa sensacion nos impulsa a actuar de alguna manera.
Esta vez quiero aclarar que el texto pretende ser ilustrativo de alguna manera, me llamó la atención el dilema al que se enfrenta Batman: Tomar la justicia por su propios medios o dejar que un sistema legal aprehenda y juzgue a los malhechores. Aunque Ciudad Gotica se encuentra muy lejos en la imaginacion de las personas, su realidad no es tan ajena a la de estos tiempos. En muchas partes del mundo aun se viven tiempos violentos que muy seguramente han motivado a mas de una persona a hacer lo correcto, aun cuando su repercusión no sea de gran impacto en la sociedad. Con esto quiero hablar del "Vigilantismo" un tema que guarda relación con el conflicto colombiano.
La palabra Vigilantismo en si es un extranjerismo (No pretendo ser docto de la lengua, por lo que pido excusas de antemano por las imprecisiones que pueda escribir). Es una actividad de tipo justiciera que implica el actuar en la delgada linea de la legalidad y lo irregular. En el caso de una sociedad presuntamente civilizada, los hombres enajenan parte de sus derechos y libertades al Estado con el fin de contribuir al bien supremo de la paz y la seguridad. Sin embargo, el problema empieza cuando el aparato institucional de poder no es suficiente para hacer frente al peligro de la inseguridad, expresada en delitos contra la vida y la integridad personal, el patrimonio economico o cualquier otro tipo de afrenta que no tiene porque soportar un ciudadano corriente.
A través de la historia encontramos varios antecedentes del vigilantismo. En la mitologia griega las "Erineas o Eumenides", eran personificaciones femeninas de la venganza, que perseguian sin descanso a los autores de ciertos crimenes. El poeta Virgilio afirmaba que eran tres: Alecto (Implacable, castigadora de delitos morales), Megera (Seductora, castigadora de los delitos de infidelidad) y Tisífone (vengadora del homicidio, castigadora de los delitos de sangre).
En Sicilia, durante la edad media, existió una sociedad secreta llamada los "Vendicatori", cuyos miembros vengaban los delitos y gozaban el favor de la gente. Sin embargo, el rey Guillermo II disolvio a la sociedad, ahorcando al gran mestre y marcando con hierros a cada uno de los miembros. Contemporaneas fueron las Cortes de Vehm o Vehmgericht en Alemania, donde se atribuia el poder de la vida y la muerte a un tribunal sobre las personas que cometian delitos. En Estados Unidos, durante su guerra de independencia hubo grupos de "ciudadanos de bien" armados hasta los dientes que perseguian a los ladrones y homicidas para ahorcarlos en el acto. Mas adelante, durante la guerra de secesión los enardecidos sureños conformaron cuadrillas para perseguir tanto a negros (hoy llamados afroamericanos para no ofender) como a abolicionistas colaboradores del norte.
Es curioso como en tiempos modernos, a pesar de los avances en cuestión de Derechos Humanos y el reconocimiento a la dignidad humana aun se siguen viendo casos de vigilantismo. Al parecer el Estado no puede alcanzar a ciertos criminales que gozan de una impunidad absoluta de forma descarada. Vemos como ejemplo el grupo denominado "Sombra Negra" de El Salvador que tiene como objetivo especifico los miembros del inmenso grupo delincuencial llamado "Mara Salvatrucha" que opera por todo centroamérica y Estados Unidos.
En Colombia existe Vigilantismo. Sin entrar en detalles ni mencionar nombres por prudencia , encontramos que ciertos grupos toman la justicia por su propia mano (justificando sus acciones por las cometidas por otros grupos) actuando de forma alterna al Estado y a la institucionalización de poder. Nuestro querido ordenamiento jurídico aún es muy idealista y poco práctico y la Policía Nacional aunque ha arrojado resultados concretos aún no puede hacer frente a las fechorias de muchos.
En los ultimos años en Estados Unidos se ha venido desarrollando el proyecto "Minuteman" que consiste en que las personas que habitan en poblaciones cerca a la frontera con Mexico persigan a los indocumentados que atraviesan el rio grande con esperanzas de conseguir un futuro mejor. Estos vigilante modernos estan armados, tienen radios y no quitan el ojo de las cercas, todo con el fin de capturar inmigrantes. Sin embargo, algunos han llegado a maltratar fisicamente a estas personas antes de entregarlas a agentes de inmigración. Otro ejemplo de los desbordes del vigilantismo.
Alrededor del mundo las razones son muchas para que exista el Vigilantismo: inmigrantes ilegales, pedófilos, herejes, indigentes, gente de otras razas u origenes etnicos, drogadictos, delincuentes, narcotraficantes o terroristas. Todos pueden ser un objetivo relativamente desde ciertos puntos de vista y perspectivas. El fomento a la defensa privada de los intereses puede tener sus excesos.
Debe alimentarse el sistema legal y judicial de un país, así como su fuerza pública para evitar este tipo de prácticas que pretenden perseguir un fin noble. Se debe asistir a la justicia por sus propios canales.
El espectro etico del vigilantismo es extenso. Cuando existe impunidad recurrente y descarada podría ser justificable, sin embargo, llegar a los extremos es poco confiable porque estariamos pasando por alto tanto los derechos humanos, como aquellos consagrados en nuestra Carta Politica, entre los cuales encontramos la presunción de inocencia, la privacidad, y el debido proceso.
Esta vez quiero aclarar que el texto pretende ser ilustrativo de alguna manera, me llamó la atención el dilema al que se enfrenta Batman: Tomar la justicia por su propios medios o dejar que un sistema legal aprehenda y juzgue a los malhechores. Aunque Ciudad Gotica se encuentra muy lejos en la imaginacion de las personas, su realidad no es tan ajena a la de estos tiempos. En muchas partes del mundo aun se viven tiempos violentos que muy seguramente han motivado a mas de una persona a hacer lo correcto, aun cuando su repercusión no sea de gran impacto en la sociedad. Con esto quiero hablar del "Vigilantismo" un tema que guarda relación con el conflicto colombiano.La palabra Vigilantismo en si es un extranjerismo (No pretendo ser docto de la lengua, por lo que pido excusas de antemano por las imprecisiones que pueda escribir). Es una actividad de tipo justiciera que implica el actuar en la delgada linea de la legalidad y lo irregular. En el caso de una sociedad presuntamente civilizada, los hombres enajenan parte de sus derechos y libertades al Estado con el fin de contribuir al bien supremo de la paz y la seguridad. Sin embargo, el problema empieza cuando el aparato institucional de poder no es suficiente para hacer frente al peligro de la inseguridad, expresada en delitos contra la vida y la integridad personal, el patrimonio economico o cualquier otro tipo de afrenta que no tiene porque soportar un ciudadano corriente.
A través de la historia encontramos varios antecedentes del vigilantismo. En la mitologia griega las "Erineas o Eumenides", eran personificaciones femeninas de la venganza, que perseguian sin descanso a los autores de ciertos crimenes. El poeta Virgilio afirmaba que eran tres: Alecto (Implacable, castigadora de delitos morales), Megera (Seductora, castigadora de los delitos de infidelidad) y Tisífone (vengadora del homicidio, castigadora de los delitos de sangre).
En Sicilia, durante la edad media, existió una sociedad secreta llamada los "Vendicatori", cuyos miembros vengaban los delitos y gozaban el favor de la gente. Sin embargo, el rey Guillermo II disolvio a la sociedad, ahorcando al gran mestre y marcando con hierros a cada uno de los miembros. Contemporaneas fueron las Cortes de Vehm o Vehmgericht en Alemania, donde se atribuia el poder de la vida y la muerte a un tribunal sobre las personas que cometian delitos. En Estados Unidos, durante su guerra de independencia hubo grupos de "ciudadanos de bien" armados hasta los dientes que perseguian a los ladrones y homicidas para ahorcarlos en el acto. Mas adelante, durante la guerra de secesión los enardecidos sureños conformaron cuadrillas para perseguir tanto a negros (hoy llamados afroamericanos para no ofender) como a abolicionistas colaboradores del norte.
Es curioso como en tiempos modernos, a pesar de los avances en cuestión de Derechos Humanos y el reconocimiento a la dignidad humana aun se siguen viendo casos de vigilantismo. Al parecer el Estado no puede alcanzar a ciertos criminales que gozan de una impunidad absoluta de forma descarada. Vemos como ejemplo el grupo denominado "Sombra Negra" de El Salvador que tiene como objetivo especifico los miembros del inmenso grupo delincuencial llamado "Mara Salvatrucha" que opera por todo centroamérica y Estados Unidos.
En Colombia existe Vigilantismo. Sin entrar en detalles ni mencionar nombres por prudencia , encontramos que ciertos grupos toman la justicia por su propia mano (justificando sus acciones por las cometidas por otros grupos) actuando de forma alterna al Estado y a la institucionalización de poder. Nuestro querido ordenamiento jurídico aún es muy idealista y poco práctico y la Policía Nacional aunque ha arrojado resultados concretos aún no puede hacer frente a las fechorias de muchos.
En los ultimos años en Estados Unidos se ha venido desarrollando el proyecto "Minuteman" que consiste en que las personas que habitan en poblaciones cerca a la frontera con Mexico persigan a los indocumentados que atraviesan el rio grande con esperanzas de conseguir un futuro mejor. Estos vigilante modernos estan armados, tienen radios y no quitan el ojo de las cercas, todo con el fin de capturar inmigrantes. Sin embargo, algunos han llegado a maltratar fisicamente a estas personas antes de entregarlas a agentes de inmigración. Otro ejemplo de los desbordes del vigilantismo.
Alrededor del mundo las razones son muchas para que exista el Vigilantismo: inmigrantes ilegales, pedófilos, herejes, indigentes, gente de otras razas u origenes etnicos, drogadictos, delincuentes, narcotraficantes o terroristas. Todos pueden ser un objetivo relativamente desde ciertos puntos de vista y perspectivas. El fomento a la defensa privada de los intereses puede tener sus excesos.
Debe alimentarse el sistema legal y judicial de un país, así como su fuerza pública para evitar este tipo de prácticas que pretenden perseguir un fin noble. Se debe asistir a la justicia por sus propios canales.
El espectro etico del vigilantismo es extenso. Cuando existe impunidad recurrente y descarada podría ser justificable, sin embargo, llegar a los extremos es poco confiable porque estariamos pasando por alto tanto los derechos humanos, como aquellos consagrados en nuestra Carta Politica, entre los cuales encontramos la presunción de inocencia, la privacidad, y el debido proceso.
